Por fin ha llegado la primavera, y con sus días más largos y soleados, los árboles en flor y las temperaturas casi veraniegas, hay muchas razones para salir de la hibernación. Y eso significa disfrutar de sus actividades primaverales favoritas con la mejor vista posible.
Los aficionados a las actividades al aire libre podrán admirar las flores de primavera con la mayor claridad si siguen estos sencillos consejos para el cuidado de los ojos.
4 aspectos de las lentes de contacto que hay que tener en cuenta para las actividades al aire libre
Cuando se trata de actividades al aire libre, las lentes de contacto se consideran la solución más cómoda y práctica para corregir la visión. He aquí la razón.
- Mejor visión periférica: Las lentes se colocan directamente en el ojo, por lo que su visión, especialmente la periférica, no se ve obstruida.
- Visión estable: las lentes de contacto no se mueven, ni se deslizan por la cara ni se caen en momentos inoportunos. La mitad de una pared rocosa no es el mejor lugar para juguetear con las gafas graduadas.
- No se ven afectadas por el clima: a diferencia de las gafas, las lentes de contacto no se ven afectadas por condiciones meteorológicas adversas como la lluvia o la niebla, ni se sobrecalientan en climas cálidos.
- Compatibles con auriculares y cascos: menos voluminosas que las gafas, las lentes no estorban con los auriculares, cascos o gafas de sol.
Consejos para el cuidado de los ojos al aire libre
Las lentes de contacto ofrecen muchas ventajas para los amantes de las actividades al aire libre, pero para poder disfrutar de estas libertades, es necesario practicar un cuidado adecuado de las lentes. Sigue estas sencillas estrategias para mantener a raya el cuidado de tus ojos esta temporada.
- Lleva suministros de reserva: los usuarios de lentes de contacto deben llevar consigo algunos «productos de confort» adicionales para una excursión, un paseo en bicicleta, una acampada o cualquier otra actividad al aire libre. Como mínimo, tendrás que llevar un estuche para las lentillas, solución salina y un par de lentillas extra (por si acaso), así como gafas.
- Mantenerlas limpias: Es importante ser minucioso en la higiene de las lentes de contacto, sobre todo si han estado en contacto con la suciedad y el sudor. Lávete siempre las manos antes de tocar las lentillas para minimizar el riesgo de que las bacterias malas entren en los ojos y causen una infección. Si no se dispone de agua y jabón, lleva contigo algunos geles o toallitas desinfectantes, pero asegúrate de elegir productos de base natural que no contengan sustancias químicas como Tricosan.
- Combatir la sequedad ocular: Las temperaturas más cálidas de la primavera pueden dejar los ojos secos e irritados. La forma más eficaz de aliviar la sequedad ocular es aumentar el nivel de agua en los ojos con el uso de lágrimas artificiales. Los colirios también están disponibles en cómodos tamaños de viaje.
- Proteja tus ojos de las alergias: las alergias estacionales tienden a aumentar en primavera debido a la afluencia de alérgenos en el aire, como las esporas del moho o el polen de los árboles. En cualquier caso, esto no tiene por qué impedir las aventuras al aire libre. Lleva unas gafas de sol y sal al exterior durante la tarde, cuando los recuentos de polen son más bajos.
- Cambia a lentes de contacto diarias: considera la posibilidad de utilizar lentes de contacto diarias desechables para evitar la acumulación de depósitos y alérgenos en la superficie de las lentes. Basta con quitar las lentes y tirarlas al final de un largo día de uso, sin la molestia de tener que limpiarlas y llevar la solución adecuada: una alternativa inteligente para los viajes de acampada.